miércoles, octubre 31, 2007

ES SÓLO UN VACÍO

Sí, sólo un vacío, pero muy grande el que siento, el que tengo como pesada carga todos los días de mi vida, es tan fuerte que me deja exhausto. Sólo la noche me conforma, cuando duermo, por eso será que siempre estoy dispuesto a enterrarme en la almohada y dejar que el profundo sueño me devore literalmente, son horas maravillosas en que ese vacío desaparece, se esfuma, no pesa más, no trae más recuerdos, no compromete más, tampoco remuerde.
Y trato de llenarlo con variedad: trabajo, deporte, estudio, licor (mucho licor, a veces), pero no se va, o se oculta intimidado pero vuelve, siempre está ahí.
No sé qué sienta al final, quizá me acostumbre, no lo quisiera. Posiblemente las cosas sean así por algo, mientras tanto sigo, tratando de esquivar su fiereza, fuerza, ímpetu y soberbia, pero no lo logro del todo. Estoy a punto de decirme a ejercer una "ética del vacío personal" (¿qué escribí?).
Quisiera postear anécdotas, cosas simples y bonitas como lo hacen otros, pero no me deja, o no me decido, no sé, pero es que lo tengo tan cerca, en la cabeza, el corazón, la vista, el sexo...